La cirugía estética continúa evolucionando, ofreciendo soluciones que van más allá de la apariencia física, ayudando a mejorar la calidad de vida y la salud de las personas. Intervenciones como el aumento de pecho, el bypass gastrico, la rinoplastia ultrasonica y la vaginoplastia son solo algunos ejemplos de cómo la tecnología médica se pone al servicio de las necesidades estéticas y funcionales de los pacientes.